domingo, 26 de junio de 2011

PRENSA CULTURAL. "Babelia". "Pequeña magnitud" (1), de Fernando Aramburu (San Sebastián, 1959)

Fernando Aramburu
  
   En Babelia, suplemento cultural de "El País":

Pequeña magnitud (1)

FERNANDO ARAMBURU 18/06/2011

   Nuestra percepción de la existencia cambiaría de forma notable, y no precisamente para mal, si conforme transcurre el tiempo aumentasen nuestras provisiones de lozanía. Bastaría para ello nacer en la vejez y, a partir de ahí, vivir un año tras otro hacia la infancia. Dejar para siempre la residencia de ancianos sería algo así como hacer la primera comunión. Cada vez que acudiéramos al médico, el diagnóstico mejoraría. Poco a poco los espejos borrarían nuestras arrugas, nos devolverían el pelo y los dientes perdidos. No tendría nada de extraño que un día muriéramos sanos, inocentes, sin rencor, y que la muerte apenas representara para muchos de nosotros el lance de un juego; aún menos, la interrupción de un calorcillo.

   ¿Cuándo inventarán el primer anciano que comprenda y no repruebe el mundo que abandona?

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   No sé qué es peor, que me devoren cinco o seis leones o que, nada más empezar a engullirme, me escupan porque les doy asco.

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   Si en vez del espermatozoide del que provengo, otro de los que participaron en aquella frenética carrera hubiese fecundado el óvulo de mi madre, una persona distinta, acaso con el mismo nombre, habría ocupado mi lugar. A veces, por la noche, cuando reina el silencio, me parece escuchar en torno a mí un coro apenas audible de malévolas risitas.

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   El Universo debe de ser indestructible puesto que no le causa siquiera un rasguño borrarse enteramente en cada uno de nosotros cuando morimos.

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   No tengo las ideas claras, pero tengo un sofá.

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   El otro día constaté por casualidad que me conozco personalmente. No podría afirmar lo mismo de mi esqueleto a pesar de que siempre vamos juntos a los mismos sitios.

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   Aunque aquejados de escepticismo, no cesan de componer una obra tras otra. Quizá actúen así por precaución. De otro modo, ¿cómo podrían justificar su vida toda si el futuro les deparase de repente algún tipo de esperanza?

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